En el siguiente blog encontraras temas relacionado con la educación,tecnologías que apoyan a la practica educativa y estrategias de aprendizaje que van ligada a los recursos para educar.
martes, 17 de julio de 2018
Alejandro Magno
Conquistador macedonio
Alejandro Magno fue un príncipe de Macedonia. Nació el 20 de julio del año 336a.C. y era hijo del rey Filipo de Macedonia y su esposa Olimpia. Su padre, Filipo, era un soldado muy poderoso y un político muy importante, así que le enseñó todo sobre las guerras y sobre cómo gobernar un país y organizar un imperio. Además, el filósofo griego Aristóteles fue su profesor particular y le enseñó las historias griegas del pasado y las antiguas leyendas. En especial, Alejandro Magno se obsesionó con Aquiles, un héroe griego, y estaba decidido a convertirse en alguien como él. Su madre siempre le dijo que su padre no había sido Filipo sino el dios griego llamado Zeus, y desde muy pequeño él lo creyó.
Durante tres años se fue con Aristóteles para aprender lengua, política y literatura, y a los 16 años volvió a su hogar. Su padre se había casado con otra mujer y había tenido otro hijo, esto enfadó mucho a Alejandro Magno que decidió convertir a su padre en un enemigo y se exilió.
Tiempo después, él y su padre se reconciliaron y puedo volver a Macedonia, pero su padre terminó siendo asesinado.
Con veinte años le coronaron rey de Macedonia y tomó la decisión de luchar contra los persas, que habían sido enemigos de su imperio desde hacía muchos siglos. Así, Alejandro empezará su viaje para ampliar su imperio conquistando otros lugares; viaje que duraría once años.
Al principio de su conquista consiguió que el rey persa llamado Darío fuera asesinado, lo que le hizo mucho más fácil la conquista del territorio de los persas, que ya no tendrían ningún rey. Su fama llegaría hasta Egipto, donde le recibirían como a un dios dándole el título de faraón.
Alejandro Magno creó muchas rutas de comercio, hizo que la cultura griega fuera conocida por todo su imperio y creó lazos entre Oriente y Occidente.
Una noche, celebrando una de sus conquistas en un banquete, se puso enfermo. Durante unos once días tendría fiebre muy alta hasta que al final murió a los 32 años, en el 323a.C.